Autor: Àngel Solé

El whisky llegó a mi vida por casualidad y se quedó. Desde entonces, mi amor por el whisky no se ha roto nunca, salvo alguna infidelidad esporádica en algún bar innombrable. Mi placer favorito: catar whiskies y describirlos. Además de las notas de cata, suelo escribir artículos históricos y económicos, aunque también disfruto comentando noticias curiosas del sector. Un buen whisky es como una sinfonía, y yo siento devoción por los whiskies con cuerpo y los afrutados. Mi debilidad tiene nombre: Glenfarclas.

GlenDronach anuncia Kingsman Edition 1991 Vintage

¿Qué whisky beben los espías? Es evidente que la vida de un agente puede ser tremendamente estresante: Esquivar balas, saltar desde rascacielos, desconectar bombas...…