‘Wee, sleekit, cow’rin, tim’rous beastie,
O, what a panic’s in thy breastie!’
– Robert Burns
Así empieza «To a mouse», uno de los poemas más icónicos del famoso poeta escocés Robert Burns. Así, esa «temorosa bestia» ha inspirado uno de los Remarkable Regional Malts de Douglas Laing & Co: Timorous Beastie.
Douglas Laing lanzó Timorous Beastie en 2014. El whisky del ratón se convertía así en la tercera expresión de su nueva serie Remarkable Regional Malts. Si bien el ratón de Burns era una bestia tímida, Douglas Laing afirma que este whisky no es para los débiles de corazón.
Timorous Beastie es un vatted que captura la esencia de las Highlands. Para crearlo se utilizan maltas de Dalmore, Glengoyne y Glen Garioch entre otros. Esta expresión se produce sin colorante añadido y sin filtrar en frío. Timorous Beastie se embotella al 46.8% de volumen.
Podéis encontrar Timorous Beastie en tiendas especializadas por un precio que ronda los 45 euros. Si además lo compráis en la web de Douglas Laing, podéis llevaros una miniatura de The Epicurean de regalo.
Nota de cata de Timorous Beastie
La vista
Timorous Beastie viene en una botella negra. En su etiqueta, en blanco y negro, encontramos una divertida ilustración de un ratón. En copa el whisky es oro pálido.
La nariz
Timorous Beastie es un whisky muy potente en la nariz. Empieza con dulces y cremosos aromas de manzana y canela, con un toque cítrico de naranja tostada y zumo de limón.
Posee también notas de vainilla y azúcar quemado que se mezclan con un interesante toque herbáceo. Ligeras notas de malta.
El paladar
En boca es meloso y picante. Desde el inicio encontramos notas afrutadas que se mezclan con un lado cremoso. Así, las notas de manzana verde y piel de naranja se mezclan con notas de crema catalana y un toque de chocolate amargo.
Mantiene el equilibro entre las notas cremosas y un punto seco, potenciado por notas de canela, jengibre y un poco de pimienta.
El final
El final es medio, seco y picante. Permanecen suaves notas de tarta de manzana.
Conclusión
Timorous Beastie es un whisky atípico. Si bien en la nariz esperas un malta más dulce, en el paladar crea un curioso equilibrio en el que mezcla la parte más cremosa con un toque seco.
Siguiendo con la línea de otras expresiones de la gama Remarkable Regional Malts, no es un whisky extremadamente complejo, pero si es sorprendente e interesante. Una buena elección si te apetece probar algo nuevo.