En 2015, una microdestilería abría sus puertas en Vitoria. La llamaron Basque Moonshiners y su vodka de patata, Basmoon Vodka, se ha convertido en todo un éxito. Mientras Basmoon crecía, algo se cocía a fuego lento: Agot Single Malt. Hoy, el primer whisky de Basque Moonshiners ya es una realidad.
Desde el primer minuto, en Basque Moonshiners quisieron hacer whisky. Una apuesta valiente, teniendo en cuenta que el whisky requiere tiempo y paciencia. Pero, en un momento en el que proliferan las nuevas destilerías de whisky en todo el mundo, ¿por qué no hacerlo aquí?
El proceso de creación de Agot Single Malt es el de un producto kilómetro 0. En la maltería Intermalta, se escogieron las variedades de maltas navarras pilsner y munich. Posteriormente, estas pasarían el proceso tradicional que da lugar al whisky. Primero, la maceración con agua (mashing) a 60/65º, seguida de una fermentación larga de 6 a 7 días.
De ahí, a la destilación en un alambique coffey de doble columna configurado como Pot Still. Finalmente, algo más de 3 años en barricas exbourbon y barricas de Rioja Alavesa. Un proceso de producción completo de 3 años y 5 meses, con el apoyo de Manu Iturregui, de Residence Café, que ha dado lugar a Agot Single Malt.
«Nos gusta que nuestros productos tengan alma», afirma José Luis Navarro, uno de los fundadores. De ahí que hasta el nombre del whisky se inspira en la historia de la zona. Agot hace referencia a los Agotes, descendientes de los visigodos que se refugiaron en el pirineo navarro. Caracterizados por su gran estatura, sus cabellos rubios, sus ojos azules y una curiosa forma en el lóbulo de la oreja, estuvieron marginados durante muchos años. Así, este grupo étnico llegó a tener que llevar una pata de oca en la ropa para poder identificarlos.
Agot Single Malt Pioneer Edition es la primera expresión de Basque Moonshiners. Se trata de una edición limitada a 989 botellas numeradas (se ha embotellado un tercio de la destilación de 2015). No habrá más botellas de Agot Single Malt hasta enero de 2020.
Se ha embotellado al 46% de volumen sin filtrar en frío y sin colorante añadido. Su precio de venta es de 47 € y lo encontraréis en tiendas especializadas como Magatzem Escolà o Spirits Akkers.
Nota de cata de Agot Single Malt (Pioneer Edition)
La vista
La botella de Agot Single Malt es de líneas clásicas. Viene en un tubo que comparte diseño en tonos blancos, negros y rojos con la etiqueta. En ambos vemos un agote de estilo picassiano y la marca de la pata de oca. En copa, Agot Single Malt es cobrizo.
La nariz
Agot Single Malt es un whisky dulce en la nariz. Encontramos notas afrutadas de manzana al horno, plátano y melocotón en almíbar. Le acompañan notas de cebada malteada, vainilla y galletas de mantequilla. Un toque chocolateado.
Posee notas de frutos secos (principalmente almendras) acompañadas de especies como la canela y la nuez moscada. En el fondo, es ligeramente herbáceo.
El paladar
En boca, Agot Single Malt empieza seco y astringente, con intensas notas de roble. Posee un cuerpo medio y el primer golpe es muy herbáceo. Poco a poco aparecen las notas dulces de vainilla y miel, acompañadas de chocolate con leche.
Tiene un toque floral, y la fruta de la nariz no aparece hasta prácticamente el final. Principalmente, encontramos notas de plátano que acompañan un toque especiado de nuez moscada y clavo.
El final
El final es medio, tirando a largo. Muy intenso y dulce.
Conclusión
En Basque Moonshiners apostaron el primer día por el whisky y eso es algo que se nota en el producto final. Agot Single Malt es un whisky joven que supera las expectativas. Posee un carácter propio, creado con el cariño de la destilación y la atención en la elección de barricas.
Al final, todo se reduce a que es un whisky que cuenta su propia historia. Y esto, siendo un primer intento, dice mucho de la capacidad de Basque Moonshiners a la hora de producir destilados. Si esto es lo que pueden hacer en menos de 4 años, no podemos esperar a ver todo lo que vendrá después.
