Cuando pensábamos que la gama de Redbreast estaba completa, llega Irish Distillers y la amplía. Llega Redbreast 27 años, una nueva expresión permanente que se une a la gama habitual de su icónico whisky Pot-Still.
Este nuevo whisky se convierte en la expresión de más añada de la gama y, seguramente, una de las más deseadas. Redbreast 27 años incluye whiskies envejecidos en barricas de oporto ruby, añadiéndole complejidad y matices al característico estilo de Redbreast.
Nuevo Redbreast 27 años
Algo distinto llega para esta nueva expresión de Redbreast. El equipo de la destilería de Midleton lleva más de 30 años viajando al valle del Douro en Portugal para seleccionar barricas únicas. Allí encontraron barricas de oporto ruby, que llenaron con destilado pot-still en la destilería.
Y ¿qué aportan las barricas de oporto ruby al clásico whisky pot-still? Nuevas notas afrutadas y un toque de roble tostado que complementan, según la destilería, «el estilo rico y robusto del destilado». Para Billy Leighton, Master Blender de Irish Distillers, es una evolución lógica tras trabajar durante años con barricas de jerez y otros vinos. «Queríamos romper los límites y crear a la vez una expresión que encajara con el resto de la familia Redbreast», comenta.
Redbreast 27 años se embotella al 54.6% de volumen y se producirá en cantidades limitadas. Según la destilería, «añade notas de mango, piña y bayas al sabor característico de Redbreast, distinguiéndolo del resto de expresiones de la gama».
Lo encontraréis en tiendas muy especializadas por un precio recomendado de 495 euros.
Nota de cata de la destilería
Nariz: Una mezcla de frutas exóticas y bayas rojas, complementada por hierba fresca y especias de la madera. El dulzor de la vainilla y el caramelo se combina con las notas de frutos secos y roble tostado.
Paladar: Increíblemente rico en textura, con una combinación de lujo de fruta madura y bayas de verano, con un toque de aceite de chile. Notas mentoladas de cereza, vainilla y canela, complementadas con pimiento rojo, nuez moscada y roble tostado.
Final: Un largo equilibrio de fruta madura y especias.
Tuve la suerte de probarlo (ojo, no comprarlo), por parte de un buen amigo, y sinceramente me pareció de los mejores whiskies que he probado. Cabe destacar sus notas afrutadas que dejan en la boca. Muy buen post!!
¡Qué afortunado Juan Rubén!