La destilería de Glenglassaugh, situada en el bonito pueblo de Portsoy, ha lanzado dos nuevas expresiones. Se trata del segundo lanzamiento del duo Glenglassaugh Octaves, con las expresiones Classic y Peated.
La destilería de Speyside ha jugado con pequeñas barricas de tipo octave para dar nuevos matices al whisky. Para esta ocasión, han creado octaves a medida con madera de barricas de Bourbon, Pedro Ximénez, Oloroso y Amontillado de Jerez y Oporto. Cada una de estas barricas posee unos 65 litros de capacidad.
Usar barricas de tamaño tan reducido permite que el espirituoso tenga más contacto con la madera. Un hecho que se ve potenciado cuando el almacén está cerca del mar, como sucede en el caso de Glenglassaugh.
El duo de Glenglassaugh Octaves es una muestra, según Rachel Barrie, de la influencia de la naturaleza. «Este duo muestra olas de sabor que se intensifican y evolucionan con cada trago. Son dos joyas elementales en la historia de la destilería», añade Barrie.
Glenglassaugh Octaves Classic – Batch 2
La primera de las expresiones de este duo de Glenglassaugh Octaves es la clásica. Para esta expresión se han combinado octaves de Bourbon, Pedro Ximénez y Amontillado de Jerez.
Según la destilería, posee dulces notas de fruta tropical con notas de café especiado y un toque de frutos secos y roble. Glenglassaugh Octaves Classic se ha embotellado al 44% de volumen sin filtrar en frío y sin colorante añadido. Su precio ronda los 80 euros.
Glenglassaugh Octaves Peated – Batch 2
La segunda expresión es la octave ahumada. Para crear Glenglassaugh Octaves Peated se utiliza malta turbada que ha madurado en octavas de Bourbon, Oporto y Oloroso de Jerez.
Según la destilería, posee notas de caramelo salado y ciruelas, con un toque de humo y sirope de arce. También se ha embotellado al 44% de volumen, sin filtrar en frío y con su color natural. Su precio ronda los 70 euros.
