Bowmore está que se sale. Si hace poco más de un mes anunciamos el lanzamiento de dos nuevas botellas, una de 1964 y otra de 1985, ahora nos sorprende con la botella escocesa que quizás sea la más cara del mundo. Según informó la propia destilería saldrán al mercado 12 botellas de 57 años en octubre con un precio inicial en subasta de unos 125.000 euros. ¿Logrará Bowmore batir el récord Guiness de The Macallan? La batalla Islay Vs. Speyside está servida.
La batalla Islay Vs. Speyside está servida
Bowmore 1957 fue embotellado en 2011 y, como decíamos, sólo hay 12 unidades disponibles. Se subastarán las botellas número 1 y 2; la primera tendrá lugar el 10 de octubre en Bonhams, una famosa empresa de subastas, y dos semanas después habrá una segunda subasta en Nueva York. Además y según informa la compañía, las ganancias netas se destinarán a cinco organizaciones benéficas escocesas.
La mayor parte de los barriles de 1957 fueron embotellados en 1995, pero uno en particular fue guardado debido a su gran excepcionalidad. Desde 1995, el barril de whisky se ha examinado cada seis meses para comprobar la calidad, el sabor, la evolución y los cambios del espíritu que el whisky sufría en su viaje a través del tiempo.
La mayor parte de los barriles de 1.957 barriles fueron embotellados en 1995, pero uno en particular fue guardado debido a su gran excepcionalidad
Aparte de las dos botellas subastadas, otras dos pasarán a los archivos de la destilería Bowmore. ¿Y las otras ocho botellas? Bormore las pondrá en venta, pero sólo para los que vayan a buscarlas directamente a la destilería de Islay.
La botella, el cofre del tesoro
Para presentarnos su preciado whisky Bowmore no ha escatimado en su presentación. Cada una de las 12 botellas ha sido soplada a mano y esculpida por dos de los más importante del mundo del cristal: los artistas Brodie Nairn y Nichola Burns (los mismos que diseñaron las botellas de Bowmore de 1964 y 1985).
La forma ha querido imitar a las olas que constantemente se estrellan contra las rocas sobre las que se encuentra instalada la destilería Bowmore. El vidrio lleva incrustados brillantes sobre platino, uno de los metales más raros y preciosos en la tierra. Además, cada botella lleva grabado a mano el número de botella y el tapón de platino ha sido elaborado a mano por Hamilton & Inches, la joyería de la Reina de Inglaterra.
Maduración en el barril y notas de cata
Según la nota de cata de la propia destilería, Bowmore 1957 es una sinfonía de aromas y sabores nunca antes experimentados. Después de la destilación en 1957, el nuevo whisky fue colocado en un barril de jerez de segundo llenado (donde pasó 43 años) y en el año 2000 se trasladó a un barril de whisky, también de segundo llenado.
Cada una de las 12 botellas ha sido soplada a mano
En nariz, Bowmore 1957 nos sorprenderá con un elixir de arándanos silvestres y los higos con almendras, frutas tropicales suaves y ricos matices a roblez.
En boca revela capa tras capa un auténtico océano de gustos dulces y refinados con suaves notas a arándanos e higos. También hallaremos sal marina y eucalipto fresco. A continuación, humo y trazas de chocolate negro con notas de pomelo y roble jugoso, arrastrado por brisa marina.
Este viaje sensorial termina con un final largo y susurrante de bergamota y anís estrellado.
Evidentemente, los humildes redactores de todowhisky.es nunca podremos contrastar estas informaciones, ¡así que animamos a que algún potentado lector nos cuente en octubre su opinión!
El vídeo
Os dejamos con el vídeo promoci0nal que ha editado Bowmore, está en inglés, ¡pero vale la pena!
