Brown-Forman, productora de whiskies como Jack Daniel’s y Woodford Reserve, ha decidido llegar a Europa con la construcción de una nueva destilería en Irlanda. La compañía americana invertirá 50 millones de dólares (unos 45 millones de euros).
Con esta inversión, Brown-Forman construirá una destilería y un centro de visitantes en el histórico castillo irlandés de Slane, antiguo hogar de Henry Conyngham, Marqués de Conyngham. Para ello, contará con el apoyo de la familia Conyngham, que dotará a la destilería del carácter tradicional que le gusta a Brown-Forman.
Brown Forman y la Slane Irish Whiskey Distillery
Se espera que la Slane Irish Whiskey Distillery se inaugure a finales de 2016, lanzando sus primeras expresiones para la primavera de 2017 (inicialmente usando whisky de otras destilerías hasta que el producto de la destilería de Slane llegue a su maduración).
«El whisky irlandés ha sido uno de los segmentos de mayor crecimiento a nivel mundial en los últimos años», afirma Lawson Whiting, vicepresidente ejecutivo de Brown-Forman, y añade que la compañía quiere entrar en este segmento con la producción de nuevos whiskies irlandeses. Whiting también añade que quieren crear un whisky único y de gran calidad, incluyendo expresiones blends, pot-still y single grain.
Alex Conyngham, descendiente del Marqués de Conyngham, afirma que la familia está encantada en unirse a Brown-Forman y dar a conocer un poco más de Irlanda. «Nuestro compromiso de cuidar la tierra, cultivar la cebada y la herencia familiar están totalmente acordes con la producción de whisky que realiza Brown-Forman, y estamos seguros que está unión será exitosa», añade.
Henry Conyngham, otro de los descendientes, afirma que la familia será una parte activa en la creación de estos nuevos whiskies. «Sabemos que Brown-Forman es el compañero perfecto para llevar los nuevos whiskies irlandeses a Estados Unidos y a otros mercados mundiales», añade.
