La destilería Johnnie Walker ha lanzado un espectacular nuevo Blend. Inspirado en el espíritu emprendedor y aventurero de Sir Alexander Walker, la nueva edición se llama John Walker & Sons Odyssey y lleva uno de los estuches más curiosos que nunca hayamos visto, reafirmando el camino que ha tomado la destilería de Diageo en el negocio de los whiskies de lujo.
Éste magnífico whisky incorpora tres tipos de whisky de malta envejecidos en barrica de roble europeo seleccionados personalmente por el Maestro Destilador Jim Beveridge. Odyssey pretende conmemorar el 80 aniversario de una de las innovaciones más notables Sir Alexander (una jarra de whisky que se movía con el movimiento de las olas del mar). De hecho, el estuche del whisky está diseñado para que la botella pueda girar suavemente 360º, como si de una brújula se tratara.
Hay una demanda insaciable de whiskies Super Premium a nivel mundial y en particular en Asia Pacífico
«Busqué entre muchas destilerías de Escocia para encontrar los tres whiskies perfectos para combinar en la edición de John Walker & Sons Odyssey. Tenían que tener el derecho y el pedigrí para crear los aromas, sabores, perfumes y sensaciones que Sir Alexander buscaba cuando creó la mezcla original hace casi 80 años», dijo Jim Beverdige en declaraciones a un periódico Indio.
El resultado, según la destilería, es un whisky complejo y suave, con tonos dorados, un aroma con notas de miel, frutas del bosque y caramelo. En el paladar encontraremos cítricos, frutos silvestres, toques de miel y caramelo. John Walker & Sons Odissey tiene un final añejo, suave y algo alargado.
«El lanzamiento de John Walker & Sons Odyssey en Asia Pacífico antes del despliegue global demuestra nuestro compromiso con esta región. Hay una demanda insaciable de whiskies Super Premium a nivel mundial y en particular en Asia Pacífico», dijo asimismo el director de marketing de la destilería.
No es de extrañar ese nuevo amor de las destilerías por los whisky Premium o Super Premium. A nivel mundial, los beneficios del whisky escocés de lujo son, de media, un 12% superiores a los del whisky normal.
